POLÍTICA

Marta García, que dejó Cs pero sigue como diputada, se posiciona contra el transfuguismo junto a casi todo el Parlamento

La ex diputada de Ciudadanos Marta García Martínez, el portavoz de Cs en el Parlamento de Cantabria, Félix Álvarez Palleiro, y el diputado del Grupo Parlamentario Ciudadanos, Diego Marañón
La ex diputada de Ciudadanos Marta García Martínez, el portavoz de Cs en el Parlamento de Cantabria, Félix Álvarez Palleiro, y el diputado del Grupo Parlamentario Ciudadanos, Diego Marañón

El Pleno del Parlamento de Cantabria ha manifestado este lunes su rechazo al transfuguismo como "práctica de corrupción política y fraude a la voluntad de los ciudadanos". Lo ha hecho aprobando una proposición no de ley (PNL) presentada por Ciudadanos (Cs) tras la marcha del partido de Marta García, que posteriormente fue expulsada del grupo parlamentario y al no renunciar a su acta permanece como diputada no adscrita.

La marcha de García derivó en que el Grupo Parlamentario Cs pasara de tener tres diputados a dos y tuviera que disolverse

Todos los partidos salvo Vox, que se ha abstenido, han votado a favor, incluso la propia García, que señaló cuando anunció que no dejaría su acta que considera que la tránsfuga no es ella sino sus excompañeros, Félix Álvarez y Diego Marañón, por su cambio de postura en torno a la protección del lobo. Y es que la diputada dejó Cs después de que la formación se abstuviera en el Congreso en la votación de una iniciativa para acabar con la protección de la especie, algo que había venido defendiendo de forma férrea durante toda la legislatura.

En el Pleno de este lunes, el Parlamento ha hecho referencia reiteradamente al Pacto Antitransfugismo considerando esta práctica "una completa deslealtad hacia las formaciones políticas que han amparado la candidatura de los representantes políticos con el único fin de perseguir intereses de beneficio individual, incluso aunque ello suponga dinamitar la representación institucional y política que ha sido democráticamente manifestada en las urnas por todos los ciudadanos". De hecho, la marcha de García derivó en que el Grupo Parlamentario Cs pasara de tener tres diputados a dos y tuviera que disolverse, teniendo Álvarez y Marañón que compartir el Grupo Mixto con los dos diputados de Vox, Cristóbal Palacio y Armando Blanco.

Así, Álvarez ha defendido esta PNL antitransfuguismo apostando por normas para minimizar esta práctica "deleznable" que "debilita la democracia" y recordando lo que ha supuesto a su grupo, que ve reducidas sus intervenciones, presentación de iniciativas y salarios al pasar al Mixto. El portavoz de Cs ha hecho varias alusiones a García y a sus declaraciones, señalando que los tránsfugas "se erigen la voz del pueblo" -ella dijo que seguiría siendo "la voz del mundo rural" como diputada no independiente- y recordando que acusó al resto de formaciones de "querer acallar la voz del mundo rural" tras su expulsión del grupo. De hecho, García ha intentado hablar tras el debate de esta PNL "por alusiones", pero el presidente del Parlamento, Joaquín Gómez, no le ha dado la palabra.

"Ellos son las voces del pueblo y el resto, menos Vox, una panda de traidores y de cretinos", ha ironizado Álvarez. Y es que había rumores que apuntaban a la posible marcha de García a este partido para las próximas elecciones, pero la diputada ya lo negó, asegurando que ni siquiera se lo habían propuesto y que había sido una invención para "hacerle daño".

Mientras, Vox ha sido el único grupo que no ha votado a favor de la iniciativa, sino que se ha abstenido considerando que un "tránsfuga de libro" es un concepto que "nos hemos inventado porque tenemos que ir al literal" de la definición para usar ese calificativo con alguien que deja su partido por no ir en contra de sus ideales. Así, el diputado Cristóbal Palacio se ha referido al alcalde de Ruente, Jaime Díaz Villegas, que se ha dado de baja del PRC, o los tres concejales regionalistas de Camargo que votaron en el último Pleno municipal en contra de la adjudicación del contrato de basuras impulsado por su equipo de Gobierno. Considera que estos ejemplos son "tránsfugas de manual, pero no reales", porque "no han obedecido a sus jefes de partido. No han hecho algo contrario a sus ideales, pero se convierten en traidores para su partido".

Un planteamiento que han rechazado el resto de grupos porque creen que, si no se está de acuerdo con el partido con el que se accedió el cargo, la "coherencia política" requiere "dejar el acta", como ha defendido el regionalista Pedro Hernando. Y aunque todos los demás sí han votado a favor, no han faltado los cruces de acusaciones por prácticas de transfuguismo entre los partidos, especialmente al PP y Cs. Al primero, por casos como el ocurrido en Murcia, donde tres diputados que firmaron la moción de censura contra el 'popular' Fernando López Miras de la Presidencia de Murcia finalmente se descolgaron y entraron en su Gobierno; y al segundo por repetirse lo mismo en las dos legislaturas en el Parlamento de Cantabria, primero con Juan Ramón Carrancio y ahora con Marta García.

Por esto último, la diputada del PSOE Noelia Cobo ha criticado a ambos y ha señalado que le produce "cierto sonrojo" que la PNL proceda de alguien "incapaz de evitar el transfuguismo" y de defender su propio proyecto de partido. "Son ese animal que tropieza políticamente dos veces con la misma piedra y viene aquí a intentar sacar algún rédito del descalabro", ha lamentado.

En la misma línea, la 'popular' Isabel Urrutia ve "una tristeza democrática" que vuelva a pasar lo mismo en Cs en la segunda legislatura y que proceda de "quienes supuestamente venían a regenerar la democracia y de la llamada nueva política". Además, les ha pedido "dejar de mirarnos el ombligo" y llevar al Pleno iniciativas "pensando en los ciudadanos".