Convertir un local en vivienda es una práctica que se ha popularizado en los últimos tiempos. Esto principalmente en respuesta al incremento en los precios de las casas y la presencia cada vez mayor de locales vacíos. Tanto si se alquilan como si se rentan, estas viviendas tienen un coste del 30% por debajo de las casas convencionales.

Además, después de algunas reformas integrales los resultados suelen ser espectaculares. Pudiendo conseguir espaciosos loft o acogedores estudios. La opción ideal para quienes desean vivir en un lugar vanguardista en el centro de la ciudad sin gastar de más.

Así, los loft construidos a partir de naves industriales, oficinas y locales comerciales están de moda. Espacios amplios de grandes alturas e iluminación abundante están cambiando las tendencias del mercado inmobiliario. Siendo las grandes urbes como Madrid y Barcelona, donde se perciben mayores incrementos en los precios inmobiliarios y en este tipo de reformas.

Esta tendencia ha capturado la atención de inversionistas en busca de prolíficos negocios. Además, se presenta como la mejor opción para familias jóvenes con presupuestos ajustados.

Por su parte, los profesionales abocados al teletrabajo también encuentran en estas viviendas una interesante solución inmobiliaria. Siendo una manera práctica de disponer de un espacio donde atender a los clientes y vivir por un precio razonable.

Sin embargo, la ley exige una serie de pasos legales previos a la ejecución de tales reformas y modificaciones. Siendo necesarias algunas revisiones para establecer la viabilidad del proyecto, ya que en algunas ocasiones no será posible.

Entonces, para embarcarse en este proyecto es menester cumplir con una serie de trámites y requisitos. Además, es necesario contar con un profesional de la arquitectura y la construcción que avale el proyecto de reforma.

En cumplimiento con la ley

En cuanto a la transformación de locales comerciales en viviendas, el Tribunal Supremo manifestó su sentencia en el  año 2013, dictaminando el derecho de los propietarios a tal transformación.

Esto otorga libertad a los dueños de locales a usarlo como prefieran, siempre que no contravenga la ley de propiedad horizontal. También deben tenerse en cuenta la regulación estatutaria y las ordenanzas municipales.

Ante la intención de convertir un local en vivienda, debe acudirse primeramente a los Estatutos de la Comunidad de Propietarios. Esta normativa se encuentra en concordancia con la ley de propiedad horizontal. Además, define las acciones permitidas en propiedades bajo división horizontal. Haciéndose imprescindible la autorización de los demás propietarios de la asociación y de los términos establecidos en los mencionados estatutos.

Si estos estatutos no establecen de manera expresa el proceder para este tipo de reformas. Entonces, no es preciso contar con la autorización de la comunidad para realizar obras de transformación en la propiedad.

En segunda instancia, procede acudir al Ayuntamiento para consultar las normas vigentes en la localidad. En este sentido, es necesario cumplir con las exigencias del Ayuntamiento para realizar las reformas deseadas. Sin embargo, en algunos casos esto se encuentra expresamente prohibido. De contar con un escenario favorable, el paso a seguir es la solicitud del correspondiente Informe de Compatibilidad Urbanística.

Disponiendo de la autorización de la comunidad de propietarios y el informe del ayuntamiento, es posible legalizar el cambio de uso de la propiedad. Para ello, se debe consignar los documentos pertinentes solicitando la Licencia de Obras y la posterior Cédula de primera ocupación.

Indiscutiblemente, el proceso requiere la contratación de un profesional cualificado, que en primera instancia verifique la viabilidad técnica del proyecto. Posteriormente, el arquitecto debe emitir los documentos pertinentes que expliquen a detalle las características y alcances de la obra

¿Es posible convertir cualquier local en una vivienda?

Cada vez más personas desean convertir un local en el hermoso loft donde vivir, pero esto no siempre es posible. Aspectos como las dimensiones estructurales del lugar, ventilación e iluminación pueden hacer de esto un proyecto inviable

Por ello, si se está considerando adquirir un inmueble para convertirlo en vivienda, resulta imperativo que un profesional evalúe el lugar. Un arquitecto es en general el profesional cualificado para valorar la factibilidad del proyecto.

Esta es la única forma de validar que el local cumple con las condiciones necesarias para obtener los permisos del ayuntamiento. Pues, los gobiernos municipales son exigentes en el cumplimiento de las condiciones mínimas de habitabilidad.

En cuanto a la estructura el local debe poseer una altura mínima de 2,50 metros. Además, se debe disponer de una superficie útil de no menos de 35 metros. Estos parámetros pueden variar levemente de un ayuntamiento a otro. En todo caso, las reformas integrales a realizarse no deben modificar el local estructuralmente.

Así mismo, el local debe disponer de entradas mínimas de iluminación y ventilación natural. Por lo menos un 10% de la superficie total. Además, la cocina debe contar con salida de humos al exterior. Dicha salida puede ser hacia un patio interior o por un conducto hacia al tejado del edificio.

Por otra parte, las ventanas son claves en este tipo de reformas. Siendo el baño la única habitación donde puede permitirse la ausencia de ventanas. Por ello, los expertos aconsejan obras abiertas tipos loft.