Ecologistas en Acción Cantabria (EAC) ha pedido coordinación entre las administraciones local de Torrelavega y autonómica, así como una racionalización del gasto en las actuaciones en las riberas fluviales del municipio.

Según han señalado los ecologistas en un comunicado, es necesario unificar los criterios de gestión con la recién creada Área Natural de Especial Interés (ANEI) de La Viesca, compartiendo recursos y reduciendo gastos en un espacio fluvial común.

Y también es "urgente", para EAC, que las administraciones municipal y regional cambien sus políticas inversoras estableciendo trabajos de mantenimiento de forma continuada, racionalizando el gasto, "o de lo contrario seguiremos malgastando los escasos presupuestos disponibles una y otra vez, según lo exija el calendario electoral", ha advertido.

Los ecologistas se refieren al anuncio de que el Ayuntamiento de Torrelavega va a ejecutar en los próximos meses un "nuevo" proyecto de recuperación de las márgenes del río, con un presupuesto de 500.000 euros.

Así como la ejecución de la escala salmonera de la presa de La Lechera por la Dirección General del Medio Natural, anunciada en julio, con un presupuesto de 307.221 euros, encontrándose a poca distancia la presa de Puente San Miguel, que es una "barrera infranqueable" para los salmones y que necesita, en su opinión, "una intervención prioritaria".

La proliferación de especies invasoras en esta zona, así como el "grave deterioro" del mobiliario urbano, que habrá que reponer en parte, ha sido consecuencia, según EAC, de la falta de mantenimiento desde la anterior intervención en marzo-abril de 2015, el llamado Plan Besaya Green Network, con presupuesto de 708.000 euros, sobre el espacio fluvial, la Viesca y el monte Dobra.

Una intervención realizada "con una afección grave al espacio fluvial al talar alrededor de 370 árboles del bosque de ribera" y la "errónea aplicación aérea de herbicida sobre las especies invasoras", cuando "lo efectivo" es la aplicación de apósitos sobre el bambú japonés y el arrancado mecánico en el caso de los plumeros, según los ecologistas, que han apuntado que las "consecuencias negativas" de la intervención están "a la vista".

Además, los trabajos se realizaron en primavera, en el periodo de anidación de las aves, lo que supuso una "grave afección durante el proceso reproductivo". "¿La próxima actuación, se realizará de la misma forma? Una vez eliminada la especie invasora, ¿se va a regenerar el suelo, procediendo a la reforestación inmediata?", se han preguntado.

Estas intervenciones, junto a las anteriores en la misma zona a finales del 2012 (con un coste de 58.705 euros), o en 2013 (100.000 euros) en la zona las Tablas, con los consiguientes gastos presupuestarios y sin continuidad, dejan en evidencia, a juicio de EAC, una "errática política de inversiones".

"Al quedar períodos de varios años sin trabajos de mantenimiento, este abandono hace que cuando se vuelve a intervenir las especies invasoras han recuperado el espacio, perdiendo lo conseguido y partiendo de cero de nuevo, haciendo que los presupuestos invertidos se pierdan", han denunciado.

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