POLÍTICA

Una empresa factura al Ayuntamiento de Castañeda un pedido personal de semillas para el césped del alcalde

Santiago Mantecón, alcalde de Castañeda
Santiago Mantecón, alcalde de Castañeda

La factura tiene fecha del pasado 31 de diciembre de 2018, aunque la entrada en el Ayuntamiento de Castañeda es del 23 de marzo de 2022. Se trata de la compra de semilla para césped y semilla todo uso. En total, nueve kilos de semillas al precio de 69,73 euros facturados a nombre del Consistorio que se han tramitado con más de tres años de retraso. Aunque lo significativo es el pie de página de la factura: “Pedido personal del alcalde Santiago Mantecón, pasará a pagarlo personalmente”. Esta frase es la que ha levantado todas las alarmas en la oposición. Ambos partidos, PRC y PSOE, acusaron al regidor de incluir en el reconocimiento de deuda del Ayuntamiento esta factura “de origen particular” en el pleno del pasado 24 de marzo.

El remanente de Tesorería fue incorporado en su mayor parte al presupuesto de 2022 a través de una modificación presupuestaria

El pasado miércoles, 30 de marzo, el alcalde quiso salir al paso de estas acusaciones reconociendo en un comunicado que, efectivamente, “esa factura en concreto la pagué yo cuando pasé a recoger el producto, tal y como se indica”, aunque señala que “se trata simplemente de un error de la empresa que las ha emitido”, y que es un “pequeño proveedor municipal, Ferretera Española, que había presentado 94” en total.

LA PASARELA A ORILLAS DEL PISUEÑA LA PAGA EL ESTADO

En el pleno en el que se produjeron estas acusaciones, además de los insultos con los que Mantecón respondió a la oposición, llamando a un concejal socialista “ignorante” y “mentiroso” en reiteradas ocasiones, también se afirmó que el alcalde “se había fundido” los 2,8 millones de remanente que tenía el Ayuntamiento a 31 de diciembre de 2021 sin aportar la información necesaria a los grupos de la oposición.

Ante esto, Mantecón ha calificado de “barbaridad” estas acusaciones, aunque en el mismo comunicado reconoce que “debido a la Ley de Estabilidad Presupuestaria no se podía gastar”, y ahora que “se ha abierto la posibilidad” de invertirlo “no íbamos a desaprovechar la oportunidad”.

Entre los proyectos que detalla el regidor están obras como el salón de actos del colegio y del instituto, que valora en casi 800.000 euros, la pasarela a la orilla del río Pisueña, el abastecimiento de agua, el acondicionamiento de la travesía… Es decir, solo detalla cantidades de una de las inversiones que asegura haber hecho. Más allá del detalle, desde la oposición se ha recordado, además, que es falso que la pasarela a la orilla del río Pisueña se haya pagado con el remanente, pues “la paga el Estado” al incluirlo en los Presupuestos Generales.

“No estamos al corriente de todo, vemos los expedientes pero no los detalles”, han afirmado a este medio fuentes del Grupo Municipal Socialista de Castañeda, que recuerdan que en febrero de 2022 el Tribunal Supremo condenó al Ayuntamiento a facilitar la información que el portavoz del PSOE municipal, Jesús Sánchez, sobre distintos expedientes. Tras esta sentencia, se le comunicó que “esos informes no existían”. Es decir, “el Ayuntamiento ha tenido que pagar 8.000 euros (las costas del proceso) para decir que no hay, ha gastado dinero del pueblo para eso”, critican desde el PSOE.

Ambos partidos coinciden en señalar que “es mentira” que entregue la documentación que se solicita en los plenos. De hecho, desde el PRC recuerdan que en el último pleno el alcalde, Santiago Mantecón, reconoce que “no va a dar explicaciones” y consideran que “la gresca la monta él”, en respuesta a la crítica de Mantecón, que afirma que “es una oposición de acoso y derribo continuo desde que se logró la mayoría absoluta. En todos los plenos hay gresca y esto acarrea estas tonterías que no hacen ningún bien”.

NO SE CUMPLE LA ESTABILIDAD PRESUPUESTARIA, SEGÚN INTERVENCIÓN

La realidad es que el remanente de Tesorería, que ascendía exactamente a 2.897.838,23 euros, fue incorporado en su mayor parte al presupuesto de 2022 a través de una modificación presupuestaria, en la modalidad de créditos extraordinarios. El resto, 375.995,30 euros, se utilizó para financiar una nueva modificación del crédito aprobada el pasado 24 de marzo. Esta última cuantía se ha destinado a afrontar el gasto de diferentes proyectos, algunos concretos como la red de abastecimiento de agua a Pomaluengo Alto y otros tan abstractos como “compra de terreno”, “proyectos, estudios y trabajos técnicos” y “otras infraestructuras. Inversiones en terrenos”, según se recoge en la documentación consultada por este medio.

Esto implica que el equipo de gobierno del PP liderado por Mantecón ha dejado dicho remanente totalmente gastado. Según un informe de intervención del propio Ayuntamiento de Castañeda, con esta modificación presupuestaria “no se cumple el objetivo de estabilidad presupuestaria”, por lo que, de permanecer este hecho en la liquidación del presupuesto de 2022, “deberá procederse a la elaboración de un Plan Económico-financiero”.

Para el PRC, esto es “un grave y alarmante problema”, y apunta que “la viabilidad económica del Ayuntamiento quedará supeditada a la confección de unos buenos y ajustados presupuestos, y a que no sobrevengan gastos o inversiones imprevistas de gran necesidad, que nos lleven a la obligación de contraer crédito bancario”.

Esta valoración se recoge en una moción que el Grupo Municipal Regionalista trató de presentar ayer jueves, 31 de marzo, con el objetivo de que el Ayuntamiento de Castañeda se comprometiera a “no solicitar línea de crédito alguna con el fin de evitar un desequilibrio económico que evite incurrir en endeudamiento”.

Sin embargo, como ha podido saber este diario, la iniciativa regionalista no ha podido incluirse ya que el equipo de Gobierno del PP, que tiene mayoría absoluta, ha decidido modificar el funcionamiento del Pleno para que solo puedan presentarse mociones de resolución, es decir, aquellas que traten asuntos de competencia plenaria, que el Pleno haya declarado de urgencia o que se presenten con los antecedentes necesarios para pronunciarse sobre ellas, y que por lo tanto no puedan tener cabida en el punto de ‘ruegos y preguntas’ que se incluye en todas las sesiones plenarias.