LABORAL

USO denuncia que Cantur contrata seguridad extra ‘pirata’ en Cabárceno durante Semana Santa

El sindicato considera que el Gobierno es responsable de un “incumplimiento legal” y de “cualquier incidencia que pueda ocurrir” por la ineficacia del servicio.

La Ley de Seguridad Privada busca impedir que "dos empresas trabajen en el mismo servicio".

Recinto de los elefantes visto desde la telecabina
Recinto de los elefantes visto desde la telecabina

El Gobierno de Cantabria tiene previsto un dispositivo especial en el Parque de la Naturaleza de Cabárceno para esta Semana Santa, consistente en la ampliación de horarios, más taquillas y más viales de acceso. Y a esto se suma, según ha señalado el sindicato FTSP-USO, un refuerzo en la seguridad de la instalación. Sin embargo, según la organización, dicho refuerzo se ha contratado con una empresa de bajo costo, conocidas como “piratas” por los incumplimientos y el bajo nivel profesional.

En un comunicado, USO señala que “ante la previsible llegada masiva de visitantes al Parque durante la Semana Santa, la dirección del Cantur, empresa pública dependiente de la Consejería de Turismo, dirigida por Francisco Martín, ha decidido contratar a otra empresa para refuerzos”. Dicha empresa es CMM Seguridad, radicada en Murcia y que “carece de domicilio social en Cantabria”.

Según explica el sindicato, esta empresa “adolece de los recursos mínimos imprescindibles para la atención y control de los visitantes al Parque, que se espera aumente su afluencia con relación al pasado año”. Este nuevo personal, por tanto, “desconoce las instalaciones sus riesgos, salidas de emergencia”, etc, lo que para USO “pone en riesgo a visitantes y trabajadores del Parque”.

Asimismo, la Ley de Seguridad Privada, publicada  en 2014 y “todavía sin reglamentación”, debe de impedir que “dos empresas de seguridad trabajen en el mismo servicio”. Por ello, el sindicato considera que el bipartito PRC-PSOE es el “responsable de este incumplimiento legal debe de solucionar esta sinrazón llevada a cabo por la dirección de Cantur con el único fin de ahorro económico”.

Para FTSP-USO, el Gobierno es “responsable de cualquier incidencia que pueda ocurrir por ineficacia del servicio de seguridad y que debido a la afluencia de visitantes puede ser de carácter grave”. En este sentido, el sindicato acusa al Gobierno cántabro de “utilizar un doble mensaje con respecto a la inestabilidad laboral. Dice combatirla pero en realidad se comporta como un generador más de la precarización del empleo en Cantabria”.

La vigilancia del Parque de Cabárceno la realiza la empresa de seguridad Securitas Seguridad España S.A., adjudicataria del último concurso público del Gobierno de Cantabria. Esta empresa realiza la vigilancia y seguridad de todas las instalaciones del Gobierno de Cantabria con un total de 150 vigilantes de seguridad. De ellos, 9 vigilantes armados se encargan de la seguridad de las personas y de los bienes del Parque de Cabárceno. Estos vigilantes de seguridad están realizando de forma permanente cursos de formación en materias de primera necesidad, como puede ser la utilización de desfibriladores para prevenir y atender urgencias de primera necesidad, así como estar en posesión de licencias de arma larga para prevenir cualquier incidencia con los animales que están en cautividad.

REQUISITOS LEGALES

Después de conocerse estas acusaciones, Cantur ha señalado que el servicio de refuerzo de seguridad de Cabárceno se ha adjudicado "cumpliendo todos los requisitos legales".

La sociedad regional explica que pidió ofertas a seis empresas, licitando un servicio de refuerzo para los días 24 a 1 de abril, los de mayor afluencia al parque. De ellas, presentaron ofertas tres empresas y sólo dos dos válidas, dado que "Securitas la presentó fuera de plazo".

Según Cantur, la empresa contratada ha presentado toda la documentación requerida, que "acredita su competencia" para realizar el trabajo asignado. Además, cumple "todas las obligaciones" en materia social y laboral requeridas para el servicio. Por último, precisa que se trata de un servicio de vigilantes no armados.