LABORAL

El paro baja un 6,4% en el segundo trimestre en Cantabria

Sin embargo los sindicatos lo asocian a las mayores tasas de empleo temporal y parcial en una década

El sector de la hostelería es en el que más bajó el paro en julio
Camarero

El paro ha descendido un 6,4% en el segundo trimestre del año en comparación con el primero en Cantabria, que ha sido la comunidad autónoma donde más ha retrocedido el desempleo en términos interanuales, un 18,5%, según la Encuesta de Población Activa (EPA) que publica este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE). De este modo, el paro se redujo en Cantabria entre abril y junio en 2.100 personas, con lo que el número total de desempleados la comunidad asciende a 31.400. El porcentaje de descenso es inferior al medio estatal (-8%), aunque Cantabria lidera el retroceso interanual del desempleo (-18,5%), con 7.200 parados menos que en el segundo trimestre de 2017. En el conjunto del Estado el desempleo se recortó un 10,8%. En España, el paro bajó en 306.000 personas en el segundo trimestre del año, lo que supone un 8% menos que en el trimestre anterior, hasta situarse el total de desempleados en 3.490.100 personas. Entre abril y junio de este año se crearon 469.900 empleos, un 2,5% respecto al trimestre anterior, lo que situó el total de ocupados en 19.344.100 personas, su mayor nivel desde el cuarto trimestre de 2008. Este aumento de puestos de trabajo es el más elevado en cualquier trimestre dentro de la serie histórica de la EPA. En Cantabria la tasa de paro ha descendido respecto al primer trimestre del año, al pasar del 14,03% al 11,57 en el segundo trimestre y se sitúa como la séptima más baja de las comunidades e inferior a la media estatal, que se situó en el 15,28%.

La población activa en Cantabria creció en 2.100 personas de abril a junio

Entre abril y junio de este año el número de ocupados cántabros ascendió a 239.900, lo que supone 4.300 más que al término del trimestre anterior, un incremento del 1,8%, inferior al medio del 2,5% al ganarse en España 469.900 puestos de trabajo, lo que sitúa la población ocupada en algo más de 19,3 millones. Además, en comparación con el mismo trimestre de 2017, el número de ocupados se incrementó en 3.800 personas en la comunidad, un 1,6%, cuarta la subida más moderada. En toda España los ocupados crecieron un 2,8% en términos interanuales correspondiente a 530.800 ocupados más. Por su parte, la población activa en Cantabria creció en 2.100 personas de abril a junio, al contabilizar 271.200, un 0,78% más que en el trimestre anterior, en este caso en línea con la media estatal (0,72%). Sin embargo, en términos interanuales cayó el número de activos en 3.400 personas (-1,2%). La media creció un 0,47%. De las 239.900 personas ocupadas en Cantabria, la mayoría, 130.400, eran hombres, y las 109.500 restantes, mujeres. La tasa de actividad de los primeros es del 60,74% y la de las segundas del 49,9%, es decir, casi 11 puntos inferior. La tasa de actividad media se situó en el 55,15%, es decir, 0,72 puntos inferior a la del primer trimestre. Así, 14.200 de los 31.400 parados registrados en el segundo trimestre eran hombres, con una tasa de paro del 9,8%, mientras que las mujeres en desempleo fueron 17.200, con una tasa de paro del 13,57%, casi cuatro puntos superior a la de los varones.

Por su parte, UGT ha asociado el menor paro en Cantabria a las mayores tasas de empleo temporal y parcial en una década, y, en la misma línea, CCOO ha destacado que la creación de empleo solo será buena noticia si mejora su calidad.

"La recuperación económica sólo se traduce en más precariedad"

El secretario de Empleo de UGT en Cantabria, Julio Ibáñez, ha afirmado que la EPA correspondiente al segundo trimestre de este año confirma que el descenso del paro en la comunidad se asienta en un nuevo empleo cada vez más precario, ya que de hecho registramos las mayores tasas de empleo temporal y a jornada parcial de los últimos diez años. "La recuperación económica sólo se traduce en más precariedad porque el crecimiento del empleo en Cantabria responde exclusivamente a más asalariados con contrato temporal (un 60% de los 2.400 más registrados en el trimestre), más ocupados con jornada parcial (el 70% de los nuevos ocupados) y al empleo no asalariado o autónomo (1.900 nuevos en el trimestre)", ha detallado. En un comunicado, Ibáñez ha denunciado que "con esta precariedad laboral incesante" no es extraño que en el segundo trimestre se registre un 24,5% de empleos temporales (48.700 de 198.700 asalariados), el porcentaje más alto desde el mismo período de 2008 (fue de 27,08%); o que Cantabria rebase el 16% de empleos a jornada parcial en Cantabria (38.600 de 239.900), lo que no sucedía desde que en 2002 se facilitan estadísticas de este concepto por comunidades. Además, Cantabria sigue teniendo una de las tasas de actividad más bajas del Estado y una "pérdida incesante" de activos jóvenes de menos de 45 años (hay 4.300 menos que hace un año y 8.100 más de 45 o más años), lo que reafirma que el mercado de trabajo regional "no termina de repuntar porque muchas personas no buscan quedarse en él y prefieren otros lugares". Y dentro de esa baja tasa de actividad en Cantabria, la de los hombres (60,7%) supera en más de 10 puntos a la de las mujeres (49,9%), lo que "confirma el problema es grave para todos pero especialmente para las mujeres", ha subrayado.

En la misma línea, Comisiones Obreras de Cantabria ha advertido de que la creación de empleo mostrada por la EPA sólo será "una buena noticia" si mejora la calidad del mismo. En este sentido, el sindicato ha advertido en un comunicado que la EPA del segundo trimestre deja a Cantabria "en el furgón de cola" nacional respecto al aumento de ocupados y "esconde la alta precarización del mercado laboral". Mientras la media estatal muestra un aumento en el número ocupados del 2,49%, Cantabria sólo registra un crecimiento del 1,80% respecto al primer trimestre, la sexta comunidad con peores resultados. En la variación anual, al final del primer trimestre de 2018, la comunidad registró un aumento del 1,60% en el número de ocupados, el cuarto peor resultado de las comunidades donde crece este dato, cuando la media anual es del 2,82%. Según la secretaria de Empleo de Comisiones Obreras de Cantabria, Laura Lombilla, los datos del II trimestre son tradicionalmente buenos, pero la encuesta "sólo será una buena noticia cuando venga acompañada de mejores condiciones laborales". "Lo que nos preocupa es que, mientras cada día hay más personas ocupadas, también cada día tenemos mayor pobreza laboral. No podemos pensar sólo en números, sino que debemos hablar de las personas que hay detrás de ellos", ha instado. El sindicato cree que lo que ocurrió durante la crisis no se resume en el aumento del paro, sino en la pérdida de derechos, por lo que mientras siga vigente la reforma laboral y las empresas y el sector público "no devuelvan lo arrebatado", el descenso del paro, por sí mismo, no "deja satisfecho" a CCOO. Para CCOO, el modelo productivo y de empleo en la comunidad deja "demasiadas personas damnificadas". "Además de los que logran empleos de baja calidad, están las 10.600 personas que llevan dos o más años en búsqueda de trabajo y las 5.200 que ya saben lo que es buscarlo durante más de un año y no lograr nada", ha recordado Lombilla, que también se ha referido al 14,22% de los hogares de Cantabria donde al menos la mitad de sus miembros están parados a finales de junio.

Finalmente, el presidente de CEOE-CEPYME Cantabria, Lorenzo Vidal de la Peña, ha atribuido al "esfuerzo de las empresas de Cantabria" los últimos datos de empleo, que muestran "una radiografía en positivo" de la actividad económica en la comunidad. Sin embargo, ha advertido de que estos datos "ni son tan positivos ni están consolidados como para echar las campanas al vuelo", puesto que la realidad es que Cantabria tiene 3.400 activos menos que el año pasado. La tasa de actividad de este trimestre en Cantabria, 55,14%, es inferior a la del mismo trimestre del año pasado (55,87%). Por ello, para Vidal de la Peña, "lo positivo de los datos puntuales no debería impedir que veamos los síntomas de ralentización y reivindiquemos que se actúe en consecuencia".