Un grupo de personas que se encontraba en un paraje montañoso de Campoo de Suso ha encontrado restos óseos en una zona cercana a la que desapareció en 2020 el joven Alejandro Mencía y por donde se le estuvo buscando sin resultado.

Así lo han confirmado fuentes de la Guardia Civil, que han indicado que aún no se puede determinar si se trata de restos humanos o no, a la espera de las pruebas forenses de ADN. La Guardia Civil recibió este jueves una llamada alertando del hallazgo de los restos por el lugar donde se estuvo buscando al joven tras su desaparición en mayo de 2020.

Alejandro Mencia, de 30 años, desapareció en la madrugada del 23 de mayo en una zona de monte cerca de la localidad de Soto, en el entorno de Cruz de Fuentes de Campoo de Suso.

Al parecer, el joven se encontraba junto a sus amigos en una cabaña de la zona, cuando se acercó al río y se vio sorprendido por una intensa niebla, lo que pudo haberle desorientado. Al ver que no regresaba, sus compañeros le buscaron por sus propios medios y después llamaron al Centro de Atención de Emergencias 112, que movilizó un dispositivo para tratar de encontrarlo.

Mencía mide 1,75 metros, tiene el pelo castaño y vestía pantalón negro y playera oscura, sin camiseta, en el momento de su desaparición.