La parlamentaria autonómica de Podemos Cantabria Verónica Ordóñez ha asegurado este lunes consultada por este diario que “desde primera hora” del domingo los representantes institucionales participantes en la asamblea por el diálogo que Unidos Podemos celebró en Zaragoza detectaron “mucho movimiento” a la entrada del recinto y que ya fueron “hostigados” por “un par de docenas” de ultraderechistas al acceder al mismo. Ordóñez ha explicado que al finalizar su intervención en la asamblea, se dirigía al exterior del recinto para fumar un cigarro cuando la policía le comunicó que por motivos de seguridad no podía salir, pues en el exterior había ya “unas 500 personas insultando y amenazando”. “Una compañera que tenía que salir para tomar el AVE de vuelta a casa tampoco pudo hacerlo”, ha añadido.

“Después de la agresión a la presidenta, nos dijeron que esperáramos a que la situación estuviera controlada”

Sí había salido del recinto la presidenta de las Cortes de Aragón, Violeta Barba (Podemos), que tras hacerlo recibió un botellazo en la cabeza por parte de uno de los manifestantes ultraderechistas. “Después de la agresión a la presidenta, nos dijeron que esperáramos a que la situación estuviera controlada”, ha apuntado Ordóñez, que ha destacado que “muchos de los 400” representantes institucionales acudieron a la asamblea en coches particulares que aparcaron en las proximidades del recinto y que “sólo había 12 policías nacionales” para garantizar la seguridad de esos representantes institucionales. “Llegamos a tener miedo, hubo momentos en los que tuve miedo”, ha asegurado la parlamentaria de Podemos, que ha calificado de “desprotección, por lo menos” la situación que esos 400 representantes institucionales vivieron el domingo y ha denunciado que el delegado del Gobierno español en Aragón, Gustavo Alcalde, tardó “dos horas” en responder a las llamadas de los organizadores y después les comunicó que “no podía garantizar nuestra seguridad porque estaban bajo mínimos, al haber enviado al grueso de sus efectivos a Cataluña”.

Según ha asegurado la parlamentaria de Podemos, el ambiente dentro del recinto estaba “muy caldeado”, pues los gritos de “traición” y “ejecución” proferidos por los “nazis” que se manifestaban afuera “a veces se oían casi tanto como a los ponentes”. El acto acabó sobre las 14:15 horas y los representantes institucionales no pudieron salir hasta alrededor de las 15:15 horas, cuando los manifestantes “se fueron dispersando” y la policía “consideró que la situación estaba controlada”. A Ordóñez no le consta que se produjera “ninguna agresión” durante la salida de los representantes institucionales, pero sí “amenazas e insultos” en un clima “bastante violento”.

Echenique: “Nos dijeron que los policías están en Cataluña, entendemos que buscando urnas y papeletas, cuando estamos en nivel 4 de alerta antiterrorista”

Por su parte, el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, ha desvelado este lunes en rueda de prensa que el secretario general de la formación morada, Pablo Iglesias, llamó personalmente al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, que al parecer “no estaba informado de la situación”, y a los 20 minutos de hacerlo “la concentración mágicamente se disuelve”. “Cuando llamamos al delegado del Gobierno, nos dijo que no podía garantizar la protección de las personas que estábamos dentro [y entre los que había representantes institucionales, periodistas e incluso siete niños] porque los policías están en Cataluña, entendemos que buscando urnas y papeletas, cuando estamos en nivel 4 de alerta antiterrorista y se está dejando desprotegido al resto del Estado”, ha añadido Echenique.

Ordóñez ha asegurado que la situación vivida el domingo en Zaragoza es “consecuencia de la irresponsabilidad del Gobierno” español, al que ha acusado de “abandonar el diálogo” y practicar el “autoritarismo”. “Una actitud del Gobierno que va en la misma línea de irresponsabilidad de todo lo que está pasando sobre Cataluña”, ha considerado. En este sentido, la parlamentaria de Podemos ha destacado que pese a los “graves” incidentes vividos la asamblea “funcionó bien” y “se dio un paso muy importante en lo que es el ejercicio de la política en este país”, pues “que fuerzas que discrepamos profundamente en muchas cosas nos hayamos reunido y hayamos dado este paso merece la pena incluso con esa situación”. “Pese a todo, la asamblea fue algo positivo, porque hay que dialogar y no polarizar a la sociedad como la está polarizando este Gobierno”, ha añadido.