SUCESOS

Desarticulado en Cantabria un grupo que habría introducido hasta 200.000 euros en billetes falsos en el norte de España

La Guardia Civil ha detenido a siete personas que cortaban billetes legales de 20 y 50 euros y los pegaban a otros falsos.

Billetes falsificados incautados por la Guardia Civil
Billetes falsificados incautados por la Guardia Civil

La Guardia Civil, en el marco de la operación 'El Corte Azul', ha detenido en Cantabria a siete personas, dos mujeres y cinco hombres, por pertenecer a un grupo dedicado a la falsificación y distribución de moneda. Utilizaban menores y ancianos para adquirir productos de escaso valor con los billetes falsos.

Durante el mes de agosto, la Guardia Civil detectó gran cantidad de billetes de 20 euros falsos en circulación desde Asturias al País Vasco. A finales de septiembre la investigación estaba centrada en un hombre que frecuentaba dos casas situadas en las localidades cántabras de Hoznayo y Hazas de Cesto. En las inmediaciones de ambos inmuebles se constató una incesante actividad y una inusual presencia de personas y vehículos.

Tras la investigación de varias personas que frecuentaban estos domicilios, se comprobó que algunos de ellos habían pagado, o al menos, lo habían intentado, con billetes falsos de 20 euros en diferentes comercios repartidos por Asturias, Cantabria y el País Vasco.

El grupo distribuía los billetes falsos utilizando vehículos en los que viajaban menores y ancianos a lo largo de la geografía del norte de España

El grupo distribuía los billetes falsos utilizando vehículos en los que viajaban menores y ancianos a lo largo de la geografía del norte de España. Estas personas intentaban adquirir productos de escaso valor con billetes falsos, o simplemente pedían el cambio por monedas.

De esta manera se han podido introducir, por los efectos intervenidos, entre 180.000 y 200.000 euros en billetes de 20 y de 50 euros falsos.

Falsificación de billetes

El 'modus operandi' para la elaboración de los billetes falsos consistía en cortar parte de un billete de 20 euros de curso legal y pegar dicho recorte al falsificado, de tal manera que el billete resultante estaba compuesto por una parte legal y otra falsificada. Al billete de curso legal que le había realizado el recorte le pegaban el mismo trozo pero del falsificado, obteniendo de esta forma dos billetes.

Parte de los billetes montados eran aceptados por máquinas dispensadoras de cambio de dinero y máquinas tipo vending en las que adquirían productos de ínfimo valor para de esta forma obtener la mayor rentabilidad posible. El resto de los billetes eran introducidos directamente en establecimientos comerciales mediante engaño.

Se han realizado sendos registros en los domicilios de Hoznayo y Hazas de Cesto en los que se ha localizado un laboratorio de impresión y elaboración de billetes falsos, varias impresoras, maquinaria de corte de billetes y 17 hojas impresas cada una con varios billetes de 20 euros, preparadas para su corte y distribución.