RECONOCIMIENTO

Cicera, en Peñarrubia, ganador del Premio Pueblo de Cantabria 2022

 Imagen panorámica de Cicera. Foto- Jesús Gómez Fernández
Imagen panorámica de Cicera. Foto- Jesús Gómez Fernández

El consejero de Obras Públicas, Ordenación del Territorio y Urbanismo, José Luis Gochicoa, ha dado a conocer la decisión del jurado que, incluye, además, los accésits concedidos, como segundo y tercer clasificado respectivamente, a las localidades de Valdecilla (Medio Cudeyo) de Barcenilla (Piélagos).

En esta edición ha habido diez candidaturas de distinta entidad y objetivos con un elevado nivel y calidad de proyectos Concretamente, además de los ganadores, han optado al Premio Castillo Pedroso, Ambrosero, San Andrés de Valdelomar, Bárcena Mayor, La Concha de Villaescusa, Barcenillas (Ruente) y Cervatos

El objetivo del Premio es promover y apoyar la recuperación, mejora y mantenimiento de los pueblos de Cantabria en el marco de la defensa de los valores tradicionales, del entorno natural y ecológico, del patrimonio histórico, cultural y artístico y de la calidad de vida de los ciudadanos.

Conlleva una dotación económica de 130.000 euros para el ganador y la concesión de una placa conmemorativa Por su parte, al segundo y tercer clasificado se le conceden 10.000 euros.

El jurado, tras realizar visitas a todos los pueblos candidatos y sucesivas deliberaciones, ha tenido en cuenta la importancia de las actuaciones que se llevan a cabo en ellos para recuperar los patrimonios locales y el entorno, así como para mejorar la calidad de vida de los vecinos

Además, se ha tenido en cuenta que se hagan pensando en el tanto en los principios generadores de estos núcleos como en sus futuros desarrollos, generando espacios públicos con elementos que humanicen las intervenciones y respeten al máximo las características más destacadas.

Para elegir como ganadora a la localidad de Cicera se ha considerado su ubicación dentro de un enclave natural que lo enmarca de forma singular, y que es uno de sus mayores potenciales. Las intervenciones llevadas a cabo en los últimos años han conseguido que los visitantes se encuentren frente a un núcleo bien cuidado, con realizaciones acertadas y con el objetivo de completar un proyecto global, que incluye su entorno. El jurado valora todos los esfuerzos que realizan las instituciones y los vecinos, que día a día están elevando el carácter singular de este pueblo a niveles muy altos.

Respecto de Barcenilla, el jurado destaca que se esconde entre montes y se aparta de la carretera que lo delimita, conformado por peques agrupaciones de casas de las que destaca el barrio de La Iglesia. Las nuevas edificaciones se encuentran al borde de la carretera, permitiendo mantener las antiguas agrupaciones intactas. Un pueblo vivido que se ha protegido de la presión urbanística de parte del municipio, y en el que los vecinos se ven implicados en su mantenimiento.

Por su parte, el proyecto de la candidatura de Valdecilla ha sorprendido especialmente por su potente infraestructura como la finca del Marqués de Valdecilla, con un proceso de recuperación muy interesante y un resultado magnífico. Un esfuerzo en su mantenimiento impecable y un proyecto que pretende mejorar el entorno que también está muy bien tratado.