El Año Jubilar Lebaniego 2023-2024, que comienza oficialmente este domingo, tendrá un impacto económico "de más de 200 millones de euros" y generará 2.200 empleos, según las estimaciones del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla.

Este es el pronóstico que ha hecho Revilla durante su intervención este miércoles en el Fórum Europa de Nueva Economía, en Madrid, donde ha aprovechado para animar a todo el mundo a visitar Cantabria este año, y sobre todo Liébana, para vivir un Año Jubilar que va a ser "muy importante" para Cantabria y al que espera que asistan más de 2 millones de personas.

El Año Jubilar Lebaniego comenzará este domingo con la apertura de la Puerta del Perdón del Monasterio de Santo Toribio y un acto religioso en este templo, un arranque en el que, según Revilla, no está previsto que acuda ningún dirigente nacional o presidentes de otras comunidades autónomas, a excepción del de Asturias, Adrián Barbón (PSOE).

EL FUTURO DE CANTABRIA

Revilla ha señalado que quien acuda este año a Cantabria va a poder ver una comunidad que "está transformándose", que "tiene lo mejor por llegar" y que, a su juicio, tiene un "inmenso futuro". "Tengo bases para pensar que Cantabria va a ir muy bien", ha dicho el presidente cántabro, quien ha confiado en que esas previsiones no se vayan "al garete" si no se soluciona el problema de la guerra en Ucrania, un tema en el que ha vuelto la necesidad de una negociación para acabar con el conflicto.

Revilla ha reivindicado que Cantabria ya tiene de por sí "prácticamente todo" con sus playas, su patrimonio natural y cultural, aunque ha señalado que "hay que darle cosas" para garantizar ese buen futuro. En ese sentido, ha mencionado el valor de infraestructuras como el aeropuerto 'Seve Ballesteros', que espera que este año alcance los 1,3 millones de pasajeros, batiendo así el récord de 2019, cuando hubo 1,17; la transformación del Puerto; la llegada de la alta velocidad a Cantabria por la Meseta que está ejecutándose; el polígono de La Pasiega, cuyas obras está previsto que se adjudiquen en mayo, o el proyecto de la protonterapia de Valdecilla.

También se ha referido al proyecto del tren Santander-Bilbao o a la construcción de la nueva sede del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (MUPAC) en Santander, una infraestructura cultural que se ubicará a escasos minutos del Centro Botín y de otros dos museos en marcha, como es la sede asociada del Reina Sofía o el del Banco Santander, una confluencia que considera que va a ser "un pelotazo".

Durante su intervención, Revilla ha sido cuestionado, entre otras cuestiones, por la inminente cita electoral del 28 de mayo, a la que el presidente cántabro vuelve a concurrir a sus 80 años como candidato del PRC. Revilla ha confiado en que el PRC va a seguir gobernando otra legislatura (ahora lo hace en coalición con el PSOE) y ha reconocido que le gustaría inaugurar el AVE con Madrid, el MUPAC, La Pasiega y la protonterapia. Ha vuelto a señalar como una de las razones para presentarse a la reelección pese a su edad el evitar un pacto entre PP y Vox en Cantabria, el cual "le preocupa". "Si no está el PRC y voy yo de cabeza de lista el pacto está hecho", ha afirmado.

Revilla, que lleva 16 años de presidente (2003-2011 y 2015-2023), se ha mostrado contrario a la limitación de mandatos en política, aunque ha señalado que es algo que habría que acatar "si hay una mayoría que lo impone". Sin embargo, ha asegurado que en este momento se encuentra "bien" de salud y mantiene la lucidez.

NO CREE QUE TENGA QUE PEDIR PERDÓN POR 'LA TRAMA DE CARRETERAS'

También en las preguntas los asistentes han sacado a relucir a Revilla la 'trama de carreteras' en la Consejería de Obras Públicas, un caso de presunta corrupción por el que el presidente cree que no tiene que pedir perdón.

'¡Cómo voy a pedir perdón por lo que ha robado un funcionario en connivencia con tres empresas! Pediría perdón si hubiera sido yo el que se ha llevado el dinero", ha zanjado Revilla, quien ha vuelto a insistir en que no hay ningún cargo político del Gobierno implicado y a poner en valor las medidas adoptadas por el Gobierno regional para evitar que este tipo de situaciones se repitan.