INUNDACIONES

Santillana del Mar pedirá la declaración de zona catastrófica tras la tromba que anegó un parking con 60 coches

Las precipitaciones del sábado, que coincidieron con la pleamar, también afectaron a las pistas del colegio anexo y a puntos de Queveda y Ubiarco

Aparcamiento en Santillana del Mar
Aparcamiento en Santillana del Mar

El Ayuntamiento de Santillana del Mar solicitará la declaración de zona catastrófica tras la tromba de agua que cayó en la tarde-noche del pasado sábado, que coincidió con la pleamar, y que anegó un aparcamiento privado en el que había 60 vehículos aparcados.

Además del parking de Rolaceña, las precipitaciones afectaron a las pistas deportivas del colegio anexo, que sufrieron desperfectos, así como puntos de las localidades de Quevedo y Ubiarco, han informado fuentes municipales a Europa Press.

Asimismo, el Consistorio ha contactado con el Consorcio de Compensación de Seguros de que cara a que se hagan cargo de los desperfectos de los coches, que eran tanto de vecinos como de personas que acuden a Santillana a trabajar, y también de turistas, en este último caso tanto en propiedad como de alquiler.

Desde esta entidad han remitido a la administración local la documentación para que los perjudicados efectúen la oportuna reclamación por los desperfectos de los turismos, para lo que deberán adjuntar también facturas de taller o tasación pericial. También se ha habilitado una oficina especifica de información y para presentar las reclamaciones.

En cuanto a la declaración de zona catastrófica, el Ayuntamiento también ha iniciado la tramitación del expediente para evaluar los daños causados en los elementos de titularidad pública, que deberán realizar los técnicos municipales.

Una vez esté listo, se convocará un pleno extraordinario. Ambas gestiones se harán "a la mayor celeridad posible" y a partir de las mismas se contactará con la Federación de Municipios de Cantabria y Delegación del Gobierno para obtener dicha declaración tras esta "catástrofe natural".

Y es que el sábado 21 de julio, aunque se registraron 22 litros por metro cuadrado en unas dos o tres horas, el parking "se llenó" en apenas "20 minutos" debido a que coincidió con la pleamar. Así, se formaron balsas y las alcantarillas no "tragaban" todo el agua. Un par de semanas antes, se habían recogido 37 l/m2 en "una hora", no pasó "nada" porque no había marea alta.

"En 20 minutos el agua subió a una altura que no hubo manera de desalojar", ha comentado a esta agencia el alcalde, Isidoro Rábago, que ha añadido que "no dio tiempo ni avisar".

"No vamos a dejar de apoyar a esta gente", ha asegurado para finalizar.